Queda bastante claro que los gatos son especialmente reacios a los cambios. Un felino es un animal táctico, estratégico, atento y sigiloso. Todo esto le sirve para poder mantenerse seguro y es por eso que son criaturas que tienen muy controlado el espacio en el que se mueven. Por lo tanto, si te mudas o los muebles cambian, generan estrés en tu gato porque se desdibujan todas las claves del terrero que ha aprendido para “sobrevivir” mejor.
Claro está que los gatos que viven contigo están completamente a salvo, pero ellos en realidad, no lo saben. No tienen la capacidad de pensar “este sitio no tiene animales salvajes que me van a matar o esto es una casa y por lo tanto estoy seguro“.
1 La redecoración y las reformas en la casa o en una habitación generan estrés en tu gato
Como estábamos comentando, los felinos son muy sensibles a los cambios. Tu gato ya tiene cada rincón de la casa controlado y con eso queremos decir que se ha fijado en cada recoveco.
Entonces, ¿Qué ocurre si de un día para otro un entorno cambia? Tu gato se sentirá desconcertado y necesitará volver a revisarlo todo para ver si es una zona segura. Él no tiene la capacidad de entender la situación.
Tu gato solo sabe que eso que antes conocía ahora es diferente y por lo tanto, tiene que tener mucho cuidado. Es por eso que cualquier cambio les produce estrés. Se sienten inseguros y cada gato tiene su tiempo de adaptación.
Ya sabéis qué pasa con las mudanzas… Eso es un estrés incalculable porque cambia TODO 😱
2 Personas nuevas que aparecen generan estrés en tu gato y personas de siempre que ya no están
Indudablemente, los felinos desarrollan vínculos con los humanos con los que conviven, sobre todo cuando éstos tienen en cuenta todos sus cuidados. Por lo tanto, ¿Qué pasa cuando una persona desaparece?
Esto puede causar mucho estrés ya que ha desaparecido una figura de protección con la que además tenían un vínculo afectivo. Lo que antes era un lugar seguro, ahora lo es menos porque ya no está esa figura que les protegía.
Por supuesto, suelen haber más miembros en la familia por lo que con el tiempo se recuperan, pero no dejan de ser animales de hábitos y van a extrañar ciertos hábitos que tenían con la persona que ya no está. Si llega alguien nuevo, tiene el mismo efecto que un cambio de habitación.
Es una persona que tienen que analizar y verificar que pueden confiar. Algunos gatos son mucho más confiados que otros por lo que es cuestión de paciencia y de dejar que el gato sea el que ponga el ritmo.
3 La visitas al veterinario y todo lo que les recuerde a él
Por lo tanto, si luego huelen un objeto o cualquier cosa que les huela al veterinario, van a estresarse porque recordarán esa experiencia. Es por eso que conviene hacerle el viaje lo más cómodo posible e incluso relajarlo previamente con plantas medicinales.
4 Los viajes en trasportín generan estrés en tu gato
Es por eso que normalmente se recomienda que si los llevas en trasportín, los lleves de manera que puedan verte, para que se sientan más seguros. Intenta también que esté lo más estable posible para que no se mueva demasiado.
Es importante que si tienes un gato desde cachorro, lo acostumbres al trasportín. Al menos, que se familiarice con él.
5 Todo tipo de regaño o castigo
Los gatos no procesan la información como nosotros por lo que no tiene ningún sentido regañarlos. Ellos no entienden que han hecho algo mal porque no comparten nuestras normas sociales.
Lo que debes hacer es educar a tu gato con cariño para que abandone ciertos hábitos y así la convivencia sea mejor, pero no esperes lograrlo con regaños. La mejor manera de conseguir buenos resultados con los cambios de hábitos es mediante el refuerzo positivo dándole premios, por ejemplo.
¿Conocías estas 5 cosas que generan estrés en tu gato? Déjanos un comentario para que podamos leerte y si te ha gustado no dudes en compartirlo utilizando los iconos inferiores de redes sociales ⬇🐱💚