Descubre los medicamentos de humanos que nunca deberías darle a tu gato

Si alguna vez se ha pasado por tu cabeza darle un medicamento a tu gato, te paramos en seco para que no lo vuelvas a pensar de nuevo. Es posible que ante situaciones de urgencia pensemos que es una buena idea, pero realmente solo empeorará la situación. Siempre se debe llamar al veterinario y consultar con él las acciones a llevar a cabo para que toda la situación transcurra lo más fluida posible.

Los siguientes medicamentos que pueden ayudar al ser humano en ciertas situaciones, no sirven para los gatos y son una causa muy común de intoxicación y de problemas. Por lo tanto, revisa también dónde guardas los medicamentos para que no puedan alcanzarlos ya que sabemos que los felinos tienen una naturaleza muy curiosa.

¿Qué ocurre con los medicamentos?

Los felinos no son seres humanos y tienen un organismo diferente al nuestro. Es por eso que necesitan diferentes nutrientes a los nuestros y lo mismo ocurre con las medicinas que más que ayudarles lo que hacen es que se intoxican.

El Pet Poison Hotline de los Estados Unidos ha calculado que hasta un 50% de las llamadas se deben a envenenamientos por consumo de medicamentos humanos en mascotas. Esto quiere decir que existe un problema general con este tema y hay que hacer conciencia.

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El Ibuprofeno

Este es uno de los medicamentos más utilizados por los seres humanos para aliviar las inflamaciones y el dolor. Sin embargo, conviene siempre comer antes porque pueden generar úlceras estomacales y fallos en el hígado.

Algunas marcas añaden ciertos sabores dulces al medicamento para que no resulte tan traumática la toma, pero eso hace que también sean más llamativos para los felinos. Lo mejor es tener guardado lejos del alcance de tus gatos.

  El Tramadol

Este es un medicamento que se utiliza también para frenar el dolor. Es cierto que en ocasiones se ha prescrito para ciertos animales, pero siempre bajo la supervisión de un profesional por lo que bajo ningún caso debemos dárselo por cuenta propia.

Una dosis alta de este medicamento puede ocasionar sedación o nerviosismo, mareos, desorientación, vómitos e incluso puede causar convulsiones.

El Acetaminofén

Este medicamento se utiliza para controlar el dolor y es muy posible que tengamos alguno por casa. Resulta especialmente tóxico para los gatos y les daña los glóbulos rojos. Por lo tanto, debe estar bien guardado para que no puedan alcanzarlo.

¿Qué otros medicamentos pueden intoxicar a los gatos?

Todos aquellos medicamentos que sean antiinflamatorios no esteroidales, antidepresivos, ansiolíticos, que estén enfocados a combatir el déficit de atención y la hiperactividad, que ayuden a conciliar el sueño y las pastillas anticonceptivas.

En general, todos los medicamentos los tenemos que tener guardados en un lugar seguro independientemente de que sepamos que son tóxicos o no porque nunca debemos darle nada al felino sin antes haber consultado con el veterinario. Éste será el que pueda indicar qué medicamento darle en todo caso.

¿Qué medidas de seguridad podemos tomar?

Lo primero que tenemos que tener en cuenta es que no se le pueden dar medicamentos humanos a las mascotas sin haber consultado antes con el veterinario. Lo repetimos porque es muy importante.

Por otra parte, no hay que dejar los medicamentos a la vista sino que hay que guardarlos en un lugar al que los gatos no puedas acceder bajo ninguna manera. Normalmente, los medicamentos están envueltos en aluminio lo que hace que sea muy llamativo para el minino por lo que hay que tener aún más cuidado.

Otra cosa a tener en cuenta es que aunque un medicamento pueda ser bueno para un niño, no quiere decir que lo sea también para un gato. Y finalmente, si crees que tu felino a ingerido un medicamento, llévalo al veterinario de manera urgente.