Los gatos no son como seres vivos totalmente aleatorios. Hay ciertos factores esenciales a la hora de que tu gato se desarrolle de cierta manera; algunos los puedes de alguna forma controlar y otros no.
Es por eso que en ocasiones antes de prejuzgar sobre un gato o un perro por su manera de maniobrar con otras personas u otros animales, es importante que tengamos en cuenta la educación que han podido recibir esos animales o el cariño.
Por lo tanto, a continuación os aportamos información sobre 4 factores esenciales en el desarrollo de la personalidad de tu gato.
La increíble genética
Ésta tiene un papel esencial a la hora de comprender la personalidad que tiene tu gato. Normalmente, cada raza tiene unas ciertas tendencias aunque como todo cada gato es un mundo. Por lo tanto, lo importante es estudiar a fondo la raza de tu gato e incluso las características de su familia si las tienes a mano.
Ciertas características de las razas suelen ser transmisibles por lo que tienden a repetirse ciertos patrones. Es por eso que los gatos british shorthair tienden a ser miedosos o en el caso del devon rex tienden a generar vínculos muy profundos con sus dueños.
La genética es un factor que se está estudiando cada vez más en los felinos para llegar a comprender con profundidad los comportamientos de las razas y de qué manera pueden llegar a interactuar con los humanos.
Pero como decimos siempre, cada gato es un mundo y las personalidades de las razas no son un factor 100% exacto.
La importancia de la crianza en tu gato
Tienes una gran importancia en el desarrollo de la personalidad de tu gato porque la crianza siempre es fundamental. Esto ocurre también con los seres humanos que dependiendo de en qué familia hayamos crecido y en qué ambiente, acabamos desarrollando una serie de matices que nos diferencian del resto.
Para empezar, es esencial la convivencia de tu gato con su madre y sus hermanos además de que tome leche materna y que terminen aprendiendo ciertas nociones básicas de supervivencia.
Esta es una de las primeras experiencias sociales que obtiene tu gato y no conviene interrumpirla. Por supuesto, hay ocasiones en las que esto no se puede dar y es ahí cuando tenemos mucha importancia también para asegurarnos de completar su crianza de la manera más similar posible.
Todo el proceso materno que comentamos ayuda a que el gato posteriormente se adapte mejor a su familia humana. Por lo tanto, es importante (si es posible) que el gato sea alimentado por la madre las diez primera semanas de vida.
Luego entramos nosotros en juego. Es importante que respetemos, demos cariños y cubramos las necesidades básicos del gato. El respeto nace de entender lo que hace feliz y lo que no hace feliz a tu gato además de evitar todo tipo de maltratos físicos y psicológicos. Estos maltratos solo aportan estrés en tu gato y favorecen las conductas agresivas.
El mundo de la experiencia y de la supervivencia tiene importancia en la personalidad de tu gato
Las experiencias son claves para el desarrollo de la personalidad de tu gato. Los felinos por lo general son animales precavidos que se encuentran siempre alerta. Es por eso que cuando se encuentran en un espacio seguro en el que no han sufrido amenazas, es más fácil que desarrollen conductas relajadas con los seres humanos que les rodean.
Terminan viéndolos como parte de su familia y se sienten seguros estando cerca de ellos porque nunca pasa nada. Sin embargo, un animal que ha sufrido una experiencia traumática como puedes ser una pelea con otro gato, una mordida de perro, una intoxicación etc. pueden desarrollar conductas inseguras, agresivas o de miedo incontrolable.
Es por eso que nosotros podemos aportar un espacio seguro a un gato para que pueda desarrollar su personalidad de la manera más tranquila y sana posible. Cuando entras en contacto con un gato adoptado que ha tenido experiencias traumáticas se puede detectar porque es un gato tímido, miedoso, neurótico etc.
Estos gatos lo que necesitan es tener sus necesidades cubiertas (comida, agua e higiene), mucho amor (respetar su espacio y adaptarnos a su ritmo de cercanía) y mucha paciencia. Lo más importante es respetar sus límites ya que han vivido situaciones horribles y necesitan mucho tiempo para volver a confiar y recomponerse.
Nuestra conducta incide en la personalidad del gato
Esto tiene toda la lógica del mundo porque no podemos esperar que un gato crezca sano y tranquilo si no paramos de gritarle, tirarle una zapatilla cada vez que hace algo que no nos gusta o castigarlo encerrándolo en una habitación. Si una persona maltrata un gato, no podemos esperar una conducta sana por su parte.
Es por eso que si tratas a tu gato con amor, respecto y todo lo que se puede esperar de un vínculo sano, tu gato seguramente tenga una conducta sana. No desarrollará inseguridades, miedos, agresividad etc.
Es esencial la manera en la que tratamos todo lo que nos rodea ♥
¿Conocías estos 4 factores? Déjanos un comentario para que podamos leerte 🙂