Probablemente, lo primero que pienses es que coger a un gato es algo que no importa demasiado. Es decir, seguramente ni si quiera pienses que puedes hacerle daño si lo coges mal porque son animales muy flexibles y parece que se adaptan a todo.
Sin embargo, es muy usual que cojas a un gato y comience a zarandear las patas como si buscase algún punto de sujeción. Luego comienza a mover todo su torso para intentar zafarse de la sujeción y curiosamente, esto no lo hacen porque no quieran ser sujetados sino porque no lo hacemos bien.
Es cierto que, en ocasiones, puede pasar que no quieran ser sujetados, pero también es por una cuestión de que no lo hacemos de manera correcta. Es por eso que en este artículos vamos a hablarte de la manera óptima de coger a tu gato y que se sienta completamente cómodo.
¿Por qué cogemos mal a nuestro gato?
La principal cuestión que atormenta a tu gato cuando lo coges es que no se siente seguro. No se siente seguro en término de sujeción por lo que siente que se va a caer. Los gatos quieren sobrevivir a toda costa (hacen bien) y sienten que en tus brazos no están seguros.
Es por eso que prefieren soltarse y mantenerse por sí mismos. Lo que solemos hacer mal es que los agarramos con una sola mano en muchas ocasiones y eso hace que tengan un solo punto de apoyo en el tórax y casi podemos contarlo como que no tienen ningún punto de apoyo porque las piernas no están sujetas.
Solemos cogerlos con un solo brazo por la zona del tórax o incluso con dos brazos, pero los dos los ponemos más o menos en la misma zona. Esta no es una manera correcta de coger a tu gato.
¿Cuál es la manera correcta de coger a tu gato?
Lo primero que tenemos que procesar es que el gato necesita dos puntos de apoyo. No solo sirve con cogerlo por el tórax sino que necesita dos puntos de apoyo reales.
Las patas no pueden quedar en el aire como si estuviera volando y eso es algo bastante lógico que no nos paramos a pensar. Entendiendo esto, podemos hacer numerables combinaciones siempre y cuando el gato esté estable.
Necesitan sentir que las patas traseras están apoyadas sobre algo y si podemos incluso hacer que apoyen las delanteras, se sentirán mucho más seguros. Por lo tanto, de inicio, podemos colocar una mano en la parte delantera del tórax (donde se encuentran los pulmones) y otra mano en la parte inferior del tórax (poco antes de llegar a las patas traseras) en la zona del vientre.
De esa manera, sentirá que toda la zona central se encuentra estable.
Algún consejo más a tener en cuenta a la hora de coger a tu gato
Hay algún consejo más y es que habíamos comentado que lo mejor es darles la sensación de que están sobre algo firme. Si sujetamos al gato de la manera que explicamos anteriormente, está bien para moverlo de un sitio a otro y posarlo en el suelo, por ejemplo.
Es una manera de que no se zarandee y acabe arañándonos sin querer. Sin embargo, si lo que queremos es cogerlo por más tiempo entonces hay que añadir un paso más que es muy sencillo.
Una vez lo tienes agarrado como hemos explicado en el paso anterior, lo que tienes que hacer es apretar suavemente al gato contra tu pecho. No es que tengas que ejercer mucha presión, sino que debes acercarlo a tu pecho para que tenga un punto de apoyo extra que sería el de su costado con el de tu pecho.
Si puedes conseguir colocar sus patas traseras sobre el brazo que está más cerca del pecho, mejor aún porque tendrá las patas sobre algo firme. Si no, cuando aprietas a tu gato contra el pecho, también las patas quedan algo sujetas y se siente más seguro.
Esta sería la manera correcta de coger a tu gato para que se sienta seguro y sea todo mucho más natural para ambos.
Fuente: Helpful Vancouver Vet
¿Conocías la manera de coger a tu gato correctamente? Déjanos un comentario para que podamos leerte y si te ha gustado no dudes en compartirlo utilizando los iconos inferiores de redes sociales ⬇🐱💚