En la vida existen todo tipo de fobias que normalmente surgen por un instinto animal. Es la manera que tiene nuestra mente y cuerpo de decirnos cuidado con esto aunque en muchas ocasiones no presenta un peligro real. En mi caso se presenta con un miedo irrefrenable hacia todo tipo de insectos voladores, pero en otras personas se presenta de muchas otras maneras como miedo al agua, miedo a los tiburones, miedo a los espacios cerrados etc.

En ocasiones, estas fobias no son por instinto natural (digamos) sino que se han desarrollado por malas experiencias en la infancia o incluso por prejuicios y es que esto último que comentamos de los prejuicios tiene que ver con la fobia hacia los gatos aunque puede tener otras causas también que comentamos al final del artículo.
¿Realmente existe una fobia hacia los gatos?
La ailurofobia es más bien una fobia social. Es el resultado de una serie de prejuicios entorno a la figura de los gatos y especialmente de los gatos negros. En la actualidad está disminuyendo porque se están borrando estas creencias poco a poco aunque aún queda mucho que trabajar.

La palabra proviene del griego ailuros que significa gato y fobia que significa temor. Sin embargo, aunque pueda estar creada por prejuicios, termina teniendo un impacto en la persona que lo sufre.
¿Qué síntomas sufre una persona con ailurofobia?
Las personas que tienen esta fobia pueden presentar sudoración, problemas respiratorios, ansiedad e incluso ataques de pánico. Son personas que se sienten normalmente incomprendidas y necesitan de atención médica para superarla.
¿Por qué esta fobia puede tener una causa en los prejuicios?
En la Edad Media los gatos negros tenían encima muchos prejuicios impuestos por la Iglesia. Por lo tanto, estar en presencia de un gato negro (en la época) estaba relacionado con estar expuesto a maleficios, la mala suerte e incluso a una reencarnación del diablo.
Esto fue terrible para los gatos, en general, que pasaron de ser simples animales a ser perseguidos como el si fueran el mismísimo diablo. Fueron el foco de la ignorancia humana por mucho tiempo y lo siguen siendo.

Es por eso que se puede establecer una fobia en relación a los gatos ya que representaban toda una serie de catástrofes hasta el punto de que ciertas personas desarrollaron síntomas físicos derivados de una aprensión mental.
¿Puede haber gente afectada y que no sea por prejuicios?
Así es, no todas las personas que sufren ailurofobia se deben a los prejuicios. Hay personas que han tenido alguna mala experiencia con un gato durante la infancia que hizo que se sintieran impresionados hasta el punto de generar una fobia.

Puede haber sido que el gato te hiciera un arañazo, por ejemplo o que te bufara y te dejase una impresión fuerte. Estamos hablando de una edad temprana donde uno se puede impresionar fácilmente.
Este personaje histórico sufrió de ailurofobia
Hay un personaje que todos conocemos que sufrió esta fobia y se dice que un gato podría haberle ganado en un uno contra uno. Estamos hablando de Napoleón Bonaparte. Incluso se llegaron a hacer chisten sobre esto diciendo que el duque de Wellington ganó la batalla de Waterloo soltando unos cuantos gatitos.

Lo más importante de conocer esta fobia es que puede venir de prejuicios (aunque cada vez menos) o puede venir también de una mala experiencia en la infancia. Sin embargo, no hay que ponerse tristes porque, como todas las fobias, puede superarse con ayuda.
Nos imaginamos que no habrá seguidores de Mundo del Gato con esta fobia, pero quizá conozcan a alguien que la sufra y pueda tranquilizarle saber esta información 🙂
¿Conoces a alguien que sufra esta fobia? Déjanos un comentario 🙂