Desgraciadamente, todos los seres vivos envejecen y eso incluye a nuestros queridos gatos. Seguro que recuerdas cuándo no eran más que unos cachorritos y ahora parece que les cuesta sacar energía. Desgraciadamente, la demencia en tu gato no tiene cura y también la podemos sufrir nosotros.

Sin embargo, sí que se puede ayudar al felino a ejercitar su cuerpo y mente para que no le llegue con tanta fuerza. Por eso, es importante saber cuándo tu gato puede estar sufriendo o desarrollando demencia, para ir al veterinario a que le hagan una revisión y comenzar con los ejercicios.

¿Cuándo se desarrolla la demencia en tu gato?

Los estudios informan que alrededor de un 28% de los gatos que son revisados por el veterinario entre los 11 y 14 años muestran síntomas de tener demencia o de estar desarrollándola. Cuando el felino alcanza los 15 años, el porcentaje se dispara hasta alcanzar un 50%. Esto nos permite hacernos a una idea de los importante que es conocer la demencia en gatos porque es bastante extensa.

1 La desorientación es uno de los símbolos de la demencia en tu gato

Esto se puede percibir con facilidad porque los gatos son conocidos por manejar su territorio como nadie. Tu gato sabe perfectamente dónde está el arenero, sabe dónde está su rincón favorito de la casa, sabe dónde está la comida etc. ¿Qué pasa cuando encuentras a tu gato desorientado? Parece que no recuerda dónde estaba el arenero, la comida etc. Puedes verlo como rondando sin rumbo fijo.

2 No parece el mismo gato

Tú conoces mejor que nadie a tu gato. Sabes que cuando entras en casa va a saludarte o que cuando te sientas a ver la tele le gusta acompañarte y que le acaricien. Hay una serie de hábitos que definen tu relación con tu gato y que lo hace especial.

Sin embargo, cuando tu felino comienza a sufrir demencia, esta serie de hábitos que son habituales en él, comienzan a disiparse. Quizá ya no te recibe cuando llegas a casa, ya no se sienta a ver la tele contigo para que lo acaricies o cualquier otro hábito que siempre hace.

Parece que tu felino comienza a convertirse en un ser más neutro y menos definido. Es triste este proceso, pero es lo que ocurre también con la demencia en los humanos. ¡Hay que ser fuertes! Y entender el proceso que es la vida… Hay que intentar llevarlo con paciencia y con mucho amor.

3 La demencia en tu gato altera su sueño

Los gatos con demencia comienzan a alterar también sus hábitos de sueño. La clave está en que notas que tu gato duerme a unas horas en las que antes no dormía o se despierta a unas horas en las que antes dormía. También puede maullar en momentos extraños que no tienen sentido porque nunca antes lo ha hecho.

4 La higiene se vuelve una tarea costosa

Una de las señales de la demencia es que los felinos ya no controlan tanto su higiene. Puede ser que su aseo no sea tan eficiente o que tengan incluso problemas de incontinencia. También pueden tener menos sentido de la orientación y las heces o el pipí pueden hacerlas fuera del arenero.

5 La demencia en tu gato le quita vitalidad

La vitalidad se nota sobre todo cuando un gato es enérgico, tiene curiosidad y hace cualquier actividad con entereza. Cuando un gato comienza a tener demencia, esta energía disminuye, también por la edad.

Muestran menos interés en las cosas que antes disfrutaban e incluso pueden mostrarse más irascibles. Digamos que no tienen la energía ni la paciencia de antes y ahora están con la batería al mínimo. Pueden incluso tener dificultades para comer y probablemente no muestren tanto interés en jugar.

¿Conocías estas 5 señales de demencia en gatos? Déjanos un comentario para que podamos leerte y si te ha gustado no dudes en compartir el artículo utilizando los iconos de redes sociales inferiores ⬇🐱💚